Hace algo más de un año, cuando todavía estaba inmersa en el duelo por mi aborto, asistí a un taller para reconectar con el útero. Fue un taller muy bonito, donde aprendí unas cuantas curiosidades científicas, pero que también me permitió aflojar el nudo de sentimientos que me ahogaba y liberar un tanto la carga mental y física.
En medio de ese montón de experiencias maravillosas, me ocurrió algo muy tonto que hoy me deja con la boca abierta. Durante el descanso del taller, nos tomamos un té de esos que llevan un mensaje en el cartón de la bolsita. Las mujeres que asistían al taller conmigo empezaron a comentar el que le había tocado a cada una. Yo leí el mío muy rápido y, disimuladamente, lo separé del hilo y me lo guardé en el bolsillo. Cuando llegué a mi casa, lo puse junto a una colección de notitas que tengo encima de mi mesa, y ahí ha estado todo este tiempo.
El mensaje era: "Empty yourself and let the Universe fill you", 'Vacíate a ti misma y deja que el Universo te llene'.
No sé por qué entonces me resultó tan significativo. En aquel momento, estaba convencida de que me quedaría embarazada en la segunda transferencia embrionaria (como de hecho ocurrió, aunque volviera a perderlo). Y aún estaba dispuesta a pasar por otra FIV. La renuncia a mis genes no era una opción inmediata ni la adopción una opción posible; pero supongo que, en algún rincón de mi interior, una parte de mí se iba preparando para ello. Una parte de mí sabía que podía pasar y que habría asumirlo y que sería bueno.
He leído el cartón cientos de veces desde entonces, como un mantra, como un mensaje mágico que venía a exteriorizar algo que llevaba dentro. Y, como tantas otras cosas de mi vida, sus palabras van cobrando cada vez mayor sentido :)
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