Como cada vez que me mandan pruebas en las clínicas, lo primero que hice después de la última visita fue pedir hora con mi doctora de la Seguridad Social. Mi plan era solicitar dos citas para dos especialidades distintas: Ginecología (donde pediría la histeroscopia que, inevitablemente, ahora sí que me tengo que hacer) y Hematología (porque me tengo que repetir algunos valores de coagulación e inmunología que ya me hice con el estudio de trombofilia, pues, al parecer, hay que repetirlos al menos una vez para confirmar los resultados).
Esta misma pauta de acudir a las especialidades de la Seguridad Social la había seguido ya en otros momentos, siempre con un resultado muy bueno, la verdad: en dos o tres meses tenía todas las pruebas hechas, tanto en Ginecología como en Hematología. Así que imaginé que en esta ocasión no tenía por qué ser distinto, y estaba contenta porque eso suponía poder tener todo listo antes de que nos volvieran a llamar de la lista de adopción de embriones.
El problema es que mi doctora de ahora no es mi doctora de siempre. Mi doctora de siempre se jubiló hace cosa de un año y yo me quedé en estado de "orfandad sanitaria". No es exagerado: aquella doctora conocía mi caso desde que tuve la depresión, conocía mis circunstancias familiares y a casi todos los miembros de mi familia, conocía a Alma y, por si todo esto fuera poco, nos apoyaba activamente en la aventura de buscar el embarazo y siempre me mandaba todas las pruebas (y a todas las especialidades) que le pedía.
Desde entonces he tenido dos doctoras distintas, a las que les he ido contando mi situación de manera parcial y a trompicones. Y esta última no sé lo que ha entendido de todo lo que me pasa.
El caso es que, después de explicarle, más o menos, los últimos capítulos de mi situación, ella tomó una decisión que no me esperaba: me dio una cita para Esterilidad.
Me quedé tan en shock que no pude hacer otra cosa que aceptarla y marcharme a mi casa sin poder decidir si lo que había pasado era bueno o malo.
Desde luego, que me manden a Esterilidad a estas alturas es, cuando menos, irónico. Esta cita nos habría venido fenomenal hace tres años, cuando estábamos a punto de acudir a un clínica privada por primera vez. Pero entonces no pudo ser, claro: entonces estábamos excluidas de los tratamientos de fertilidad por la Seguridad Social al no tener "pareja masculina".
Y ahora, después de pasar por todos los tratamientos que ofrece la Seguridad Social, me mandan a Esterilidad. ¿Para qué?
La situación se volvió aún más ridícula cuando, tres días más tarde, me llamaron para ofrecerme la dichosa cita. La fecha más temprana era a finales de enero. ¡Finales de enero! No es mala fecha para ser Esterilidad, pero sí para nuestro caso concreto, pues para entonces nos llamarán para el siguiente tratamiento, y no solo no tendremos las pruebas hechas, sino que ni siquiera es seguro que nos las vayan a hacer.
Además, la doctora de la clínica nos recomendó que, antes de volver a hacer un tratamiento, fuésemos a la consulta de una reputada inmunóloga para que revisase mis pruebas y nos diera su opinión. Si esperamos a la cita de la Seguridad Social, es imposible que nos dé tiempo a hacernos las pruebas y acudir a la inmunóloga: perderíamos el turno en la lista de adopción de embriones y tendríamos que volver a esperar.
Pero, al mismo tiempo, sentimos que por fin nos ha llegado la oportunidad de hacer uso de un servicio que venimos reclamando (y pagando) desde que comenzamos en esta aventura. Ahora no es lo que necesitamos, ahora es tarde, ahora es ridículo, pero... ¿por qué no vamos a ir? ¿Por qué no pedir una segunda opinión (que en realidad es tercera, o cuarta, o quinta... ¡yo qué sé!) que además, por primera vez, nos va a salir gratis?
Tomar una decisión nos está resultando muy difícil. Pasar de la Seguridad Social nos permitiría ahorrar mucho tiempo, hacer todas las pruebas y acudir a la inmunóloga antes de que nos volvieran a llamar, y asistir a la consulta con una doctora que ya conoce mi caso y que nos da confianza. La mala noticia es que todo esto cuesta una pasta, y nuestra situación económica actual es bastante delicada.
Esperar a la Seguridad Social significaría hacer uso de unos derechos que, hasta el momento, nos habían hurtado. Significaría volver a ocupar, plenamente, nuestro lugar como ciudadanas. Significaría dejar descansar el bolsillo... ¡por fin! A cambio, perderíamos todo lo demás, sin saber exactamente qué ganaríamos. Porque ni siquiera tenemos claro lo que la Seguridad Social nos ofrece. ¿Nos harían directamente las pruebas o desecharían todo lo que llevamos recorrido para ofrecernos volver a empezar? No lo sé, y para cuando obtengamos esa respuesta, seguramente habremos perdido un tiempo precioso y una nueva oportunidad.
Por el momento, seguimos valorando la situación: de un lado, el tictac imparable del reloj; del otro, el clinclín del dinero al desaparecer.
Se admiten sugerencias :)
Comentarte que entiendo perfectamente vuestro dilema. No se si te ayudara tomar la decisión pero quiero cortarte en unas palabras nuestra historia. Soy chica OP y mi chico todo Ok, como en la SS consideraron que estamos fantásticos los dos han tardado mucho tiempo darnos la primera cita en la SS, han pasado 2 años y al final nos mandaron a IAC como dice el protocolo. 4 IAC negativas y se supone que estábamos en la cola para empezar el FIV(en la Fe de Valencia) y sorpresa! resulta que han olvidado! mandar nuestro expediente(mas años perdidos), a esperar otros 2 años y mi reloj decía tic-tac por muy "fantástica " que se supone que estaba. Hicimos una reclamación y no obtuvimos nada. Desesperados nos hemos ido a la privada, que nos dijo "caso facilisimo". Todo va bien hasta q deciden los 11 ovocitos extraidos fecundarlos con ICSI! (teniendo una muestra de gametos masculinos excelente de hace por lo menos la mitad FIV!) y fracaso, me pueden transferir solo 2 frescos y el resultado bioquímico. Aquí nos undimos mas y ya no creemos ni en la SS ni en la privada(que era IVI y se suponía q era de las mejores). Pasamos un infierno y llega por fin la cita de la Fe. No le comento el intento por privado ya que si no me quitarían un intento (y en total son 3), no le doy ninguna info del ciclo anterior y como dice el manual me fecundan esta vez mitad por FIV, mitad por ICSI. FIV resulta ser un éxito y ICSI otra vez un fracaso. Me hacen un transfer congelados en ciclo sustituido, beta cero. Me hago todos trombofilias e inmunologia, todo perfecto, pero me dice la hematóloga si fracaso otra vez me mandara heparina+Adiro aunque no ha salido nada en la analítica. Segundo intento 2 embris congelados en ciclo natural y POSITIVO!
ResponderEliminarAhora un poco de datos de la FE:
1. Si has tenido 3 intentos de FIV ya no te hacen ninguno.
2. Si consideran que eres apta para la IAC te hacen 4 IAC.
3. Si eres una chica sin pareja puedes comprar los gametos masculinos (nos 400-600 €) y te hacen la FIV, no he oído otro tipo de casos
3. las pruebas de trombofilias lo hacen después del 3er aborto y solo alguna vez después del segundo.
4. No hacen donación de ovocitos y no hacen donación de embriones.
Les he preguntado varias veces que pasa con los embriones que las parejas donan y cada vez me han dado largas.
No se en que Hospital de la SS estas, por ej. para la FE hay varios foros en la pagina enfemenino y puedes exponer tu caso y las chicas te aconsejan, a lo mejor hay un foro para tu clínica.
No sera fácil tomar la decisión, pero la que tomareis sera la mejor. Mucha suerte!
A mi me paso algo parecido en mi primer embarazo. Estuve manchando y tuve q hacer reposo, mi medica de cabecera es muy muy reacia a dar bajas asi que casi le tenia que suplicar que me diera una semana de baja para hacer el reposo absoluto que me habian mandado. Una semana fui y estaba de vacaciones, me atendio la sustituta que me dio la baja sin pensarselo diciendome que trabajando estaria toda la vida, pero embarazada solo unos meses... me gustó que no se cuestionase si debia hacer reposo o podia trabajar.
ResponderEliminarCon decirte que no me dio baja por reposo hasta 15 dias antes de dar a luz... y el bebé nació al día siguiente, vamos, que podía haberme puesto de parto en el trabajo.
Ah! Lo que te iba a decir, puedes cambiar de medico, a ver si el nuevo si te manda esas pruebas.
ResponderEliminarHola! Hace tiempo que sigo tu historia aunque nunca había escrito. Cuando yo empecé con mi TRA me hice una mutua. Ya he leído que no vais muy bien de dinero pero tal vez encuentres alguna que te cubra al menos los análisis de laboratorio y que tenga una cuota aceptable, luego una vez tengas tus pruebas hechas te das de baja y ya está. A mí me fue muy bien y eso que mi doctora de cabecera es un sol y me mandaba a hacerme cualquier cosa que le pidiera pero ya sabemos cómo son los tiempos en la SS así que prefería ir por el privado y los resultados y las citas las tenía súper pronto. Es solo una idea más. Por otro lado, no desechéis la idea de ir por la SS por lo menos para ver que os ofrecen, a nosotros nunca nos llamaron... bueno, espero que todo os vaya muy bien. Seguiré leyéndote!
ResponderEliminar¡Hola chicas! Os agradezco muchísimo vuestros consejos y vuestras experiencias. Todavía no nos hemos decidido, pero cuantos más datos tengamos, más tranquilas nos quedaremos con la decisión. ¡Seguiremos informando! ;)
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